Julio 2025

Lea

La víspera de su noche de bodas fue probablemente el momento más agridulce de su joven vida. Conozca a Lea, la poco atractiva hermana mayor, que pasó su vida a la sombra de su muy hermosa y atractiva hermana menor, Raquel. Estas hermanas amaban al mismo hombre. Él se casaría con ambas. Pero solo una tendría su corazón. La historia de Lea es una historia para la posteridad.

Agar

Agar era la madre de Ismael, el hijo primogénito de Abraham. Es posible que recuerde que Agar y Sara, la esposa de Abraham, tuvieron una relación muy tormentosa. Sara era la ama de Agar; es decir, su dueña. Agar era una esclava, una joven mujer arrebatada o comerciada de su tierra natal egipcia.

Sara

Si bien puede parecer que Sara entra silenciosamente en la historia de Abraham en Génesis, ella no se queda callada. Ella puede ser una de las mujeres más incomprendidas y menos estudiadas de la Biblia. Algunos solo ven sus peores rasgos: terca, vengativa y controladora. Ella ha recibido muchas críticas debido a sus decisiones, especialmente las que fueron contraproducentes. 

Eva

Eva fue la culminación de la creación de la humanidad por parte de Dios. Todos conocemos su historia. Ella fue tentada por el diablo, le dio la manzana a Adán, y ambos cayeron en pecado. Después de que ambos pecaron, se produjeron consecuencias perjudiciales y maldiciones que trajeron muerte, destrucción e interrupción al orden creado de Dios. Sin embargo, afortunadamente, ¡ese no sería el final de la historia de Eva!

La Novia de Cristo

¿Cómo hemos de pensar en la Iglesia? Creemos en Cristo. Eso es esencial para nuestra salvación. Creemos en Dios: Padre, Hijo y Espíritu Santo. Pero, ¿creemos en la Iglesia?

Ciertamente en nuestros Artículos de Fe, los nazarenos confesamos que creemos en la Iglesia:

En busca del Juan histórico: Una revisión académica

Desde el siglo II, hemos atribuido regularmente a la llamada Literatura Juanina a alguien llamado Juan. Sin embargo, es posible que esa identificación no sea tan directa como a veces se piensa. A pesar de una extensa discusión, la evidencia externa del período posapostólico no es concluyente.